Estiman crecimiento de la economía mexicana entre 2.5% y 2.7% en el primer trimestre de 2017
Por la incertidumbre asociada a la renegociación del TLCAN se espera que haya una desaceleración económica del país por el efecto que podría tener sobre la inversión en los próximos 18 meses, de acuerdo con el director del Departamento de Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner.
Para el FMI la renegociación del TLCAN va a generar incertidumbre y eso afectaría la inversión en México, “cosa que estamos viendo”, por lo cual es lógico que las calificadoras internacionales mantengan un “compás de espera” antes de tomar una acción sobre la nota soberana de México.
Apuntó que si bien el primer trimestre del año fue mejor de lo anticipado en materia económica, el organismo internacional mantuvo en 1.7% su estimación de crecimiento de la economía mexicana para este año apenas a mediados de abril pasado, proyección que no es optimista, sino “bastante realista”.
La economía mexicana podría haber crecido entre 2.5% y 2.7%, nivel por arriba del promedio de otras economías latinoamericanas y países desarrollados, así como del estimado por el mercado, consideró el secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña.
“La incertidumbre es real y debemos por lo tanto también de hacer esfuerzos reales por mandar señales de certeza desde aquí”, agregó, al afirmar que México cumplirá su programa de consolidación fiscal este año y la política monetaria del Banco de México está anclando las expectativas de inflación de mediano plazo.
Sobre si es un buen momento para aumentar el salario mínimo, opinó que es un tema que tiene que reflexionarse sobre la base de que esta percepción se ha incrementado 12 por ciento en términos reales en lo que va de la actual administración federal, el mayor que se haya tenido en la historia reciente.
En cuanto a la creación de un consejo fiscal en México, como lo ha recomendado el propio organismo internacional por muchos años, consideró el funcionario del FMI: “No es una panacea”.
Crear un consejo de este tipo ayuda a fortalecer la institucionalidad fiscal en los países en los que se ha visto aplicado en América Latina, como Chile, Colombia y Perú, o próximamente en España, añadió.
